El proyecto de adopciones a distancia está activo en Nepal y en varios monasterios tibetanos. Es posible “adoptar” a un niño, pero también a un anciano, enfermo o discapacitado, a un estudiante de educación superior, o incluso a un monje, de cualquier edad, que viva y estudie en un monasterio tibetano. Esto crea una hermosa relación humana, en la que ambas partes pueden dar y recibir mucho.